La etapa ideal para la realización de la ecografía 3D es entre las semanas 26-29.

En esta ecografía, además de obtener las imágenes 3D, se tomaran las medidas básicas del bebé para valorar el crecimiento, la placenta y el líquido amniótico.

La visualización adecuada de la cara depende de factores como la posición del bebé al momento de la ecografía, de la cantidad de líquido amniótico, de la presencia de cicatrices en el abdomen, la presencia de miomas, etc. Muchas de estas condiciones no pueden ser modificadas por los médicos, por lo cual no se garantiza que se pueda obtener la imagen de la cara del bebé en todos los casos.

Si en la ecografía no se logra obtener una imagen adecuada, se programará una nueva visita (incluida en el valor ya cancelado) para capturar la foto en 3D.

De las imágenes 3D tomadas durante la ecografía, debes elegir una foto, la que más te guste para aplicarle la tecnología 8K.

Al momento de finalizar la ecografía se te entregaran las imágenes en 3D, impresas en papel fotográfico y digital a través de mail.

La imagen y un clip de la conversión de la foto 3D a 8K, se te enviará vía correo electrónico en un lapso de 2 (dos) días hábiles.

Recuerda que la ecografía 3D y la tecnología 8K no reemplazan la valoración de todos de los órganos del bebé que se debe realizar entre las semanas 20-24 con la ecografía de detalle anatómico.